5 ejercicios para mejorar la circulación sanguínea

La circulación sanguínea es el proceso mediante el cual el corazón, ese motor del organismo, hace que la sangre se disemine por todo el cuerpo, distribuyendo así, los diferentes nutrientes, vitaminas y oxígeno a las células que conforman el cuerpo humano. 

¿Entonces si de hecho es tan importante, cómo lograr una buena circulación sanguínea? Es justo ahí donde entra a jugar su excelente roll, los ejercicios para mejorar la circulación.

Rutinas físicas para mejorar la circulación sanguínea

Si has sentido últimamente síntomas que te han hecho pensar que tienes una mala circulación, como la hinchazón y el constante cansancio. Entonces se convierten en motivos suficientes para hacer algo al respecto. El sedentarismo es una de las causas fundamentales de este problema. Por esa razón se proponen varios ejercicios para mejorar la circulación sanguínea.

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Caminatas de 30 minutos

Caminar constituye una de las rutinas más completas. Encabezan la lista de ejercicios para mejorar la circulación sanguínea, porque ayudan al funcionamiento de los músculos de tu cuerpo. Además, representa un aspecto esencial en las funciones cardiovasculares y respiratorias del organismo. 

No es suficiente caminar como de costumbre por los lugares que decidas recorrer. Debes crearte una rutina diaria de al menos 30 minutos, poniéndole mente y alma al ejercicio, sin entretenimientos de ningún tipo aumentando cada día el ritmo. Te sugiero recorrer pequeñas rutas e ir poniéndote poco a poco distintas metas, de esa manera verás los resultados.

Practicar natación: otro de los ejercicios para mejorar la circulación sanguínea 

Constituye uno de los deportes más completos. Su constante práctica incide directamente en la circulación sanguínea del tronco y los brazos. Además, el entrenamiento que seas capaz de implementar, va a obligarte a activar todas las partes del cuerpo y a optimizar el funcionamiento de los pulmones y el corazón.

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Flexión de piernas

Para realizar este ejercicio debes acostarte en el piso. Subir y bajar las piernas estiradas, desde esa posición, de forma alterna. Notarás en segundos que la sangre comienza a fluir de los pies a la cintura. Es una actividad física que estimula el retorno venoso, por lo que beneficia la circulación sanguínea.

Apertura de piernas

Otra buena rutina física que bien puedes alternar, con el ejercicio anterior. Extiende la espalda sobre el suelo y levanta las piernas, mantenlas rectas. Así de esa forma sepáralas y pégalas, una y otra vez. Este ejercicio es muy oportuno para activar la circulación sanguínea en las piernas. 

Doblamientos con los pies

Si eres de los que trabajas la mayoría del tiempo sentado, por las características que tu trabajo posee, hacer este tipo de ejercicios para mejorar la circulación sanguínea, resulta muy bueno. Cada vez que lo necesites haz esta actividad física, la cual consiste en poner los pies en el suelo y levantar los talones, luego descansar y después elevar las puntillas de los pies, apoyándose sobre los talones. Puedes repetir esta secuencia de ejercicios cuantas veces desees.

Síntomas que se generan por no practicar ejercicios para mejorar la circulación sanguínea.

La ausencia de ejercicios para mejorar la circulación sanguínea, desencadena muchos factores negativos en la salud humana. Señales que indican hacer algo al respecto, pues las consecuencias suelen ser irreversibles y crónicas. Si es recurrente la indisciplina con el cuerpo, de a poco van llegando los siguientes síntomas:

• Las arañitas vasculares: Se caracterizan por ser de color rojo, no sobresalen de la piel. Tienen formas de telarañas. 
• Varices: Venas dilatadas que normalmente brotan en los pies y las piernas.
• Calambres y sensación de hormigueo en los pies: La grasa acumulada en las arterias evita el flujo de sangre y ese impedimento es lo que provoca las sensaciones de hormigueo.
• Las uñas de los pies cambian su color: Debido a la falta de oxígeno y a la escasez de sangre en esos lugares, las uñas se ponen azules o violetas.
• Aparecen coloraciones en la piel: A consecuencia de la mala circulación sanguínea pueden salir manchas moradas, los pies pueden tornarse de color blanquecino.
• Cansancio y lentitud en los movimientos: Señal de que los nutrientes no llegan de manera correcta a los pies. 
• Resequedad en la piel: Los cambios en la textura de la piel, también indica una mala circulación sanguínea. La hidratación de la piel en estos casos es muy importante. De no ser así, la piel seca puede provocar heridas preocupantes.

Beneficios de la práctica de ejercicios 

Las ventajas que producen en el organismo practicar ejercicios sobre el sistema circulatorio, son cuantiosas, te propongo traer a colación sus bondades para que las conozcas y puedas compartirlas:

• Contribuye a reducir la presión arterial. 
• Acrecienta la sangre que llega a los músculos. 
• Disminuye la formación de coágulos en el interior de los vasos sanguíneos. Por lo que evita grandemente la provocación de infartos y la aparición de trombosis cerebrales. 
• Mejora la calidad de vida: Disminuye el estrés y también mejora de una manera especial el sueño de las personas.
• Combate los efectos nocivos del sedentarismo.
• Ayuda a ser un antídoto para la depresión, la angustia, ansiedad, agresividad e ira.
• Aumenta la autoestima y a sentirte mejor contigo mismo. 
• Controla el peso del organismo.
• La práctica constante de estos ejercicios incide en el fortalecimiento de los músculos que se encuentran relacionados a las piernas, glúteos y abdomen. Además de mejorar la flexibilidad en el organismo.
• Aumenta la capacidad de aprovechar el oxígeno al máximo que llega por medio de la circulación sanguínea.
• Activa la circulación de la sangre en el corazón. 
• La circulación de la sangre hacia las piernas es mucho mejor. De igual manera el retorno venoso también se beneficia.

Los ejercicios para mejorar la circulación sanguínea ayuda en gran manera a tu calidad de vida, te da una sensación de bienestar, es parte importante de implementar un estilo de vida saludable. Te ayuda a mantener una buena condición física ante los embates de las enfermedades y tienes más probabilidad de tener una vida longeva.