¿Es posible aprovechar la energía de los truenos?

Los rayos son fenómenos poco frecuentes, originan una descarga eléctrica impresionante y es muy difícil predecir su aparición. Sin embargo, todos alguna vez en la vida nos hemos preguntado si es posible aprovechar la energía de los truenos. En los últimos 30 años, se han inventado numerosos dispositivos que intentan capturarla y almacenarla. ¿Conoces alguno de ellos? Descubre detalles sobre el tema en este artículo.

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El captador de rayos que no conocías, ¿será posible?

Científicos serbios crearon un proyecto llamado Hydra Skyscraper mediante el cual se pudiera aprovechar la energía de los truenos. Idearon un edificio construido de grafeno en su borde superior y colocaron mega-baterías en su base. Teóricamente era una idea brillante porque el grafeno es un material muy resistente y con alta conductividad térmica y eléctrica. Esto permitiría que el impacto del rayo sobre la estructura condujera la energía hasta las baterías.

En esta operación, se separa el agua en oxígeno e hidrógeno y se almacena la electricidad obtenida. La teoría parecía muy alentadora, pero lo cierto es que se necesitaba instalar los sistemas en zonas montañosas. Es decir, en lugares idóneos con mayor probabilidad de tormentas eléctricas y esto es no es rentable si hablamos financieramente. Además, demandaba un potente y resistente equipo que no fuera destruido por la fuerza. Todo esto sin contar las complejas estructuras de distribución y almacenamiento.

Aunque sus diseñadores recibieron una mención de honor en los premios de arquitectura Evolo, aún no se ha podido alcanzar el objetivo. El proyecto es uno de los tantos que busca emplear fuentes de energía renovable y por eso vale el esfuerzo. La complejidad que entraña captar, almacenar y emplear la energía de los truenos es muy elevada. ¿Lograrán los científicos resolver este misterio?

¿Cuánta energía contiene un relámpago?

Un relámpago desarrolla una descarga de 5 mil millones de Joules, entre 10 y 120 millones de voltios y hasta 30 mil amperes. Esto equivale a 145 litros de gasolina y en nuestro planeta caen más de 8 millones de rayos por día. En general, toda la energía liberada representa 1252 millones de litros de petróleo. Una cantidad bestial que sería increíble valernos de ella para emplearla en el planeta.

Un punto es que los equipos que utilizamos como los dispositivos electrónicos, electrodomésticos y otros emplean corrientes entre 12 y 220 W. Por eso, si dejamos que un rayo pase corriente en un circuito tan simple ya conoces el resultado. Un aparato se derrite tras recibir una sobrecarga y también la poca estabilidad de la energía.

Si caen en promedio cien cada segundo se convertiría en una fuente bastante importante. De ser posible aprovechar la energía de los truenos sería totalmente limpia y renovable. Existen zonas geográficas en las cuales se perciben con mayor frecuencia estos fenómenos. En otras es un poco difícil por no estar distribuidos uniformemente en todo el planeta. Por ejemplo, en Kentucky, EUA caen un promedio de 70 por kilómetro cuadrado equivalente a uno cada 5,21 días.

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¿Cómo capturar los rayos?

Decirlo parece simple, sin embargo, lo cierto es que capturar un rayo y transformarlo en energía potencialmente útil es una tarea complicadísima. Un relámpago tiene una dimensión promedio de 1.500 metros y posee una velocidad entre 100 y 1.400 kilómetros por segundo. Además, emite una descarga potencial increíblemente fuerte, para ser capturada en alrededor de 10 microsegundos.

Diversas hipótesis se han trazado y se colocaron en práctica varios proyectos sin mucho éxito. En la instalación de estos sistemas se necesita movilizar numerosos recursos económicos y logísticos. Esto contrasta con la cantidad de energía útil que se ha logrado obtener de ellos lo que lo hace insostenible. Unos cuantos estudios no han pasado de ser más que un rotundo fracaso. El más importante, estimó que para sustentar 5 bombillos de 100 W durante un año, harían falta más de 12 torres.

Atraerlo es más difícil que disponer de un sistema de pararrayos. Por otro lado, sería importante la protección de la instalación que recibe en un instante la enorme energía. Además, un trueno puede traer una carga positiva o negativa y no sabes cuál tendrá el que cae. Por último, para igualar la corriente se colocarían rectificadores y capacitadores.

¿Es posible almacenar la energía de los truenos?

La respuesta a esta interrogante es sí, pero lo que se ha tornado imposible es lograr su sostenibilidad. Por ejemplo, los datos recogidos de la empresa Alternate Energy Holdings que logró alimentar una bombilla por 20 minutos. También el método utilizado por Steve LeRoy, con el cual capturó y transformó la energía de un pequeño rayo. Ciertamente, cuando se intentó llevar el proyecto a escalas mayores, no tuvo resultados de gran envergadura.

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Investigaciones más novedosas sobre aprovechar toda la energía posible

Aun así, los científicos no cesan el trabajo en su afán de encontrar nuevas fuentes de energía. Como fruto de su persistencia, se han obtenido resultados al parecer alentadores. El investigador Fernando Galembeck junto a su equipo demostraron que las gotas de agua de la atmósfera no eran eléctricamente neutras.

Fernando, en combinación con expertos brasileños, afirmaron que estas partículas pueden cargarse de energía al reaccionar con las de polvo en suspensión en el aire. A esto se le llama energía higroscópica y es un fenómeno muy común en la atmósfera. El estudio es llevado a cabo por el Instituto de Química de la Universidad Estatal de Campinas, en Brasil. El mismo se encuentra en etapa de desarrollo, pero hay muchas esperanzas en que pueda ser una fuente de energía viable.

Una de las investigaciones más novedosas es el aprovechamiento de la energía contenida en los huracanes. Estos fenómenos naturales encierran una poderosa cantidad que podría alimentar al planeta con electricidad. Algunos datos de la NASA afirman que el ciclo de vida de los huracanes puede generar lo mismo que 10 mil bombas atómicas. Eso quiere decir que son unos 600 teravatios de los que un 25% es viento. La tierra actualmente produce 6 TW y si capturamos un cuarto de la energía serían 150 teravatios. ¿Me sigues?

Significa que podríamos resolver el suministro de energía mundial de sobra. El problema sería cómo almacenarla y aprovecharla más allá de nuestro avance tecnológico y a gran escala. El científico Neil Degrasse Tyson aboga por analizar y estudiar esta vía. Por otro lado, en Japón se trabaja en turbinas que utilicen la energía de los huracanes que arrasan sus costas.

¿Entonces el mundo debería desistir de aprovechar la energía de los truenos? Desde 1980 se experimenta la posibilidad de emplear la potencia que transportan los rayos. Aún los investigadores analizan cómo capturar esa energía en su momento álgido. Ya que toda no es sólo electricidad sino también mucho calor. Sin embargo, se mantiene como una utopía que suponemos en años posteriores obtendrá una solución eficaz.