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Ciencia

Descubren dinosaurio del tamaño de un colibrí preservado en ámbar

Minas de ámbar se han hallado en lo que actualmente se conoce como la región norte de Myanmar. Estas, contribuyeron a la preservación de un era olvidada y perdida hace 99 millones de años. Antes de pudrirse, un sinnúmero de animales quedaron impregnados en aquella piedra hecha de resina vegetal, que fue capaz de conservar su anatomía intacta.

Minas de ámbar se han hallado en lo que actualmente se conoce como la región norte de Myanmar. Estas, contribuyeron a la preservación de un era olvidada y perdida hace 99 millones de años. Antes de pudrirse, un sinnúmero de animales quedaron impregnados en aquella piedra hecha de resina vegetal, que fue capaz de conservar su anatomía intacta.  

Los restos fosilizados en ámbar, especialmente los de animales diminutos, poseen una gran superioridad con respecto a los hallados en otros minerales. Esto se debe, a que la resina que los envuelve, tiene un gran cuidado a la hora de preservar las porciones blandas de las criaturas.

Entre todas las especies que se han descubierto, se encontró una muy curiosa. Un dinosaurio de más de 99 millones de años, similar a un colibrí. Sus ojos parecían los de un lagarto y sus dientes diminutos y filosos sobresalían por el pico.

Los dinosaurios

Comunmente, al pensar en la palabra dinosaurio, nos vienen a la memoria grandes ejemplares como, saurópodos, velociraptors, diplodocus y pterosauros. Hoy día, sus esqueletos adornan los museos por todas partes, sin embargo, también existieron especies más pequeñas.

Esto se prueba con el análisis de los fósiles, los cuales se han encargado de revivir, de cierta forma, toda la historia de pequeños dinosaurios que han sido olvidados hace tanto tiempo.

¿Cuál es el nombre de este dinosaurio y a qué se debe?

Es algo increíble como un animal conservado en esta piedra pereciera que lleva muerto poco tiempo. Todas las partes blandas quedan cubiertas por el ámbar y parece que no ha pasado ni un solo día desde su muerte. El personal científico que estudió al pequeño dinosaurio, le puso como nombre Oculodentavis Khaungraae.

Sus ojos, sus dientes y el hecho de ser un ave, fue lo que le otorgó su denominación. Sin embargo, su apellido es en honor a Khaung Ra, quien hizo la donación al Museo de Ámbar de Hupoge.

Además de la sorpresa de su tamaño, es casi inexplicable que algo tan magnífico esté incrustado en un fósil de tan solo tres centímetros de largo y 2.80 gramos de peso. En el mismo, que se observa el diminuto cráneo del animal, de 7 milímetros, siendo de menor longitud incluso, que un colibrí enano. La que fuera la especie más minúscula de todas los de su familia. Pero es precisamente esta característica, la que lo hace aún más interesante.

Dónde se sitúa este dinosaurio del tamaño de un colibrí en la historia del mundo

Dinosaurio del tamaño de un colibri escapa de su predador
Dinosaurio del tamaño de un colibrí

Si se tuviese que posicionar en un lugar de la historia al Oculodentavis, se diría que se encuentra entre las aves del Cretácico, quienes vivieron hace más de 66 millones de años hasta que cayó el asteroide responsable se su extinción y hace 150 millones de años, cuando aún existía en el Jurásico el Archaeopteryx.

Una imagen en tercera dimensión, del cráneo del Oculodentavis Khaungraae, ha sido capaz e permitir el estudio de dicho animal sin ocasionar daños a ningún elemento.

Posibilidades tras el hallazgo

El hallazgo de restos fósiles en ámbar, ha abierto un variado mundo de posibilidades y trae a la vida nuevamente a la antigua era prehistórica. Este maravilloso nicho ecológico ha facilitado la posibilidad de conocer, no solo la anatomía, sino la forma de vida de esta especie de dinosaurio y el paso creciente de la miniaturización

Según los estudios realizados, se ha concluido que el animal convivió con las más variadas especies de dinosaurios, desde los de cuello largo, hasta los reptiles voladores. Su diversa, pequeña y rica fauna, ha sido conservada gracias al ámbar, sin el cual se habría perdido toda su microvida, tal vez, hasta más interesante que la de las enormes especies.

Importancia del ámbar para el descubrimiento de especies pequeñas como este dinosaurio

Dicho hallazgo ha marcado una pauta en la historia de los depósitos de ámbar. Ya que la fabulosa información que brinda a los estudiosos no tiene precedentes. Dando origen a un amplio abordaje de la vida diminuta, casi perdida, de los dinosaurios. De los cuales, a no ser por este u otros minerales, no se sabría nada a los días de hoy.

Con solo observar y estudiar los restos del Oculodentavis Khaungraae, dispuestos en el ámbar, científicos como Jingmai O’Connor del Institute of Vertebrate Paleontology and Paleoanthropology en Beijing, ciudad de China, han sido capaces de descubrir todo lo relacionado con este dinosaurio del tamaño de un colibrí. Todo su estilo de vida y sus costumbres. Llegando a la conclusión, de que fue un animal diurno, particular de los árboles y devorador de insectos.   

Detalles anatómicos de este dinosaurio del tamaño de un colibrí

Esqueleto del pequeño dinosaurio colibrí
Fósil de dinosaurio que fue hallado

Ojos

Si se observa el cráneo desde un lateral, se puede concluir que en su mayoría, está representada una enorme cavidad ocular. Además, también se comprobó que su capacidad para hacer vida normal durante el día, estaba dada por una rendija delgada que solo le permitía el paso a una pequeña cantidad de luz.  

Dientes

Se ha determinado que dicho dinosaurio del tamaño de un colibrí, poseía 60 dientes afilados y diminutos. Los cuales resaltaban en su pico, diferenciándolos de las aves de hoy en día. Aunque sin duda alguna, el rasgo más atrayente de ese invertebrado son los 29 o 30 dientes que se destacan en su mandíbula, exactamente debajo del ojo.

Alimento

No se puede despreciar debido a que sea un dinosaurio del tamaño de un colibrí. A pesar de todo esto, seguía siendo un depredador carnívoro. Marcando la diferencia con las aves comunes, que se alimentan del néctar de las flores como el pájaro mosca. Este dinosaurio, deja a entre ver que su alimento eran minúsculos artrópodos o invertebrados.

Tamaño

En último lugar, analizando su longitud, aunque con precisión no se ha podido determinar su habitad natural; se presume que está dada por su capacidad para vivir en sitios solitarios.

Ventajas del ámbar

Sin embargo, los yacimientos de ámbar no solo tienen una gran relevancia en lo que a preservar especies se refiere. Ellos generan muchos ingresos y se cotizan muy bien por las industrias de este sector.

La mayoría del ámbar que contiene hermosas especies de indudable valor científico y arqueológico, se venden en China por medio del contrabando. Esto provoca, que en ciertas ocasiones, especies tan maravillosas como el Oculodentavis, terminen sirviendo de adorno en un cuello, cuyo dueño no es consciente de su hermoso significado.

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