Parásitos intestinales que viven en nuestro organismo y que debes conocer

¿Qué son los parásitos intestinales?

Son gusanos o protozoos que utilizan el intestino como refugio y allí se reproducen a otras partes del cuerpo. Existen dos grupos de infecciones parasitarias. Los helmintos que viven en el tracto gastrointestinal y los protozoarios que son organismos unicelulares.

Muchas personas suelen padecer esta patología sin saberlo. La verdad impactante es que todos tenemos algún parásito. Algunos muestran indicios y otros son totalmente asintomáticos.

En este artículo conocerás los parásitos intestinales más comunes y cuáles son los síntomas que muestran su presencia. También aprenderás los medicamentos para atacar esta patología y algunas recomendaciones generales para prevenirlas.

Cuáles son los parásitos intestinales

¿Sabías que los huevos de los parásitos están presentes en agua contaminada, tierra e incluso carnes crudas?

Aunque los niños son más propensos a sufrir de parásitos intestinales a cualquiera le puede pasar. Por eso, tienes a continuación los más conocidos y cómo se manifiestan clínicamente. Recuerda que es bueno saber, pero nunca medicarse sin la prescripción de un especialista.

Giardia Lamblia

Este protozoario cosmopolita es uno de los parásitos intestinales que afecta el tracto gastrointestinal. Puede medir entre 8 y 10 milimicras. Posee 4 núcleos que resisten a la cloración y vive en el agua hasta 2 meses. El trofozoito es su forma infectante y tiene un período de incubación de hasta 3 semanas.

Manifestación Clínica

Puede llegar a predominar los pacientes asintomáticos. Pero es productora de diarreas en personas inmunosuprimidas y malnutridas. Además de provocar brotes e intoxicaciones por alimentos y agua aún en lugares desarrollados.

Diagnóstico

Con solo analizar 3 heces fecales frescas puedes obtener un 95 % de sensibilidad. En algunos casos se hace necesario una biopsia. Si se diera un brote epidémico se utilizan pruebas de detección de antígenos.

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Tricocéfalo

Su nombre científico es Trichuris trichiura y tiene una longitud de hasta 4 centímetros. Se transmite por la ingestión de los huevos embrionarios a través de las heces. Es localizable en el apéndice y en el colon.

La manifestación clínica es mediante diarreas, apendicitis aguda, prolapso rectal, dolor abdominal y tenesmo. Para diagnosticarlo solo se requiere de un análisis en las heces, eosinofilia ligera y un estudio de piezas quirúrgicas.

Entameba histolytica – Entameba dispar

En esta ocasión hablamos de dos especies morfológicas iguales. Es endémica en países tropicales y donde la condición sanitaria y socioeconómica es mala. Desde el tracto digestivo produce infección diseminada a otros órganos especialmente el hígado.

Características

Los quistes pueden llegar a medir entre 10 y 18 milimicras. Los 4 núcleos que tiene son capaces de resistir bajas temperaturas y la concentración de cloro en el agua. También se infecta por los 8 trofozoítos que se forman en el tubo digestivo. 

Demostración médica

Un gran número de pacientes pueden tener estos parásitos intestinales y ser completamente asintomáticos. Por el contrario, se presentan manifestaciones de dolor abdominal, constipación, diarreas frecuentes y escasos leucocitos. Además de padecer un prolapso rectal.

Análisis

Se puede realizar un estudio para detectar trofozoítos con hematíes en las heces frescas. En casos urgentes que no tengan diagnóstico confirmado se utiliza la endoscopia o la biopsia.

Lombriz intestinal

La denominación dada por los científicos es Áscaris lumbricoides y su longitud oscila entre 20 y 25 centímetros. Se propaga por la absorción de los huevos de los parásitos intestinales. Se sitúa en el intestino delgado y puede alcanzar las vías respiratorias altas.

La manifestación clínica se presenta fundamentalmente en digestiones lentas, dolor abdominal, perforación intestinal, vómitos, diarreas, apendicitis aguda y peritonitis asociada. Puede afectar el sistema nervioso, reacciones alérgicas y parasitismo errático.

Diagnosis

A través del estudio de las heces es posible hallar los huevos del parásito por la expulsión por las vías respiratorias, necropsia o piezas quirúrgicas. Se logra observar eosinofilia desde moderada hasta severa. 

Oxuriasis

El nombre original es Enterobius vermicularis, su extensión varía desde 2 a 11 milímetros y con un diámetro de 1,5 milímetros. Entre sus características principales tenemos que la hembra duplica la longitud del macho. Se transmite por la ingestión de los huevos y puede infectarse repetitivamente.

Demostración médica

En el sistema digestivo se muestra con deposiciones blandas flemosas que pueden llegar a estrías sangrantes. En otras ocasiones diarreas, anorexia, dolores intestinales, vómitos, mareos, etc.

Pueden verse síntomas que afectan el sistema nervioso como trastornos en el sueño e irritabilidad del carácter. Por otro lado, activa las alergias a través de coriza y urticaria.

Análisis

Se estudia el hallazgo de los parásitos en las heces mediante el raspado de la vulva, el ano y las uñas de la persona. 

Síntomas que provocan parasitosis intestinal

El efecto de la parasitosis intestinal es muy variado. Incluso, como expusimos anteriormente, algunos son asintomáticos. Pero, estos microorganismos viven en nuestro cuerpo y debes conocer cuáles son las sintomatologías que provocan. 

• Heces oscuras y presencia de puntos blancos.
• Dolores abdominales de manera constante y ligero malestar en el ombligo.
• Picazón en el trasero.
• Deficiencia de hierro que provoca anemia.
• Mal aliento y acidez.
• Hinchazón en la barriga o exceso de gases.
• Apetito descompensado.
• Repentina pérdida de peso sin razón alguna.
• Períodos intercalados de estreñimiento y diarrea.

En los más pequeños de casa podemos notar las siguientes señales:

• Cólicos, vómitos o diarreas.
• Presencia de gusanitos en las heces.
• Cambio en la coloración de la piel.
• Pocas ganas de jugar.

Qué tratamientos se utilizan en esta patología

Existe gran variedad de medicamentos antiparasitarios. Pero, ten en cuenta que es fundamental la higiene durante y después del proceso. Esto colabora a que no se transmitan los huevos de los parásitos a otras personas.

Por lo general sólo se indica una sola dosis. Pero en ocasiones es necesario varios días y depende del parásito intestinal o el medicamento. Los fármacos como el mebendazol o el albendazol siempre se toman con las indicaciones del médico.

La nitazoxanida es de los más eficientes para combatir los parásitos intestinales que viven en nuestro cuerpo. Otro de los tratamientos es la piperazina y el pirantel que pueden ocasionar parálisis en las lombrices y así eliminarlos vivos por el organismo.

Por otro lado, tenemos la ivermectina y el tiabendazol. Dos medicamentos muy útiles para tratar las larvas. Ellos para eliminar los parásitos intestinales alteran la estructura e inhiben las enzimas de las células.

Finalmente, tenemos el metronidazol y el secnidazol. Son empleados en las parasitosis intestinales más comunes como son la Giardiasis y Amebiasis.

Existen otros remedios naturales que pueden prevenir estas infecciones. Por ejemplo: semillas de lechosa, de calabaza o una bebida de leche con toronjil de menta. Eso sí, nunca deben sustituir lo indicado por un especialista.

Medidas generales para prevenir la parasitosis intestinal

A continuación, te presento algunos consejos generales, aunque los parásitos intestinales tienen ciclos evolutivos y de transmisión. Pero consideramos necesario prevenir estas sintomatologías al aplicar estas medidas.

• Evitar criaderos de insectos.
• Eliminar residuales líquidos y sólidos.
• Adecuada manipulación y tratamiento del agua.
• No utilizar excretas humanas como fertilizantes.
• Lavar correctamente las manos y cortar las uñas.
• Proteger los alimentos del contacto de vectores y limpiarlos antes de consumirlos crudos.

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