5 Historias épicas de la Segunda Guerra Mundial que dejaron verdaderos héroes

Otra de las historias épicas durante la Segunda Guerra Mundial fue el bombardeo a Londres. Bautizado como Operación León Marino, las islas británicas fueron uno de los primeros objetivos de Hitler. Sabiendo de la superioridad de la Armada Británica, el dictador alemán centró sus esfuerzos en dañar a la población civil y destruir los recursos británicos mediante bombardeos constantes con la Luftwaffe. Durante este período, la aviación alemana y la RAF protagonizaron algunos de los enfrentamientos aéreos más impresionantes del conflicto. La férrea convicción de resistencia de Winston Churchill y la voz de Edward R. Murrow a través de la BBC fueron importantes soportes morales para que la población aguantase. 

Los alemanes fracasaron en su objetivo de vencer al Reino Unido, o al menos en invadirlo. Hitler y su ejército se había equivocado, pero aun así, infligieron grandes daños. Se produjeron escombros de viviendas caídas y la vida de más de 43000 civiles. Mientras que los alemanes solo tuvieron las bajas de 600 bombarderos. 

El 17 de septiembre de 1939 el lobo gris del mar, como le llamaban al U-29, hunde un portaaviones británico en el mar de Irlanda. El origen de estos submarinos alemanes bautizados con el nombre del animal tiene una historia que pasa por España. Wilhem Canaris, marinero militar alemán servía en el crucero Dresden, en las Islas de Pascuas durante el comienzo de la Primera Guerra Mundial. Cuando transcurría la batalla de las Malvinas, fue hecho prisionero por los chilenos en el año 1915. Este suceso en su vida le permitió aprender castellano, obtener un pasaporte falso y huir para regresar a la Patria Germana.

Una vez en su país, el español que había aprendido le servía para convertirse en el embajador de Alemania en Madrid. En su estancia, conoció al dueño de unos astilleros, desde los cuales mandaba provisiones al imperio alemán. Así fue como se convirtió en el apoyo alemán de España y en el cabecilla de estos sucesos. 

La pequeña ciudad de la costa norte francesa se convirtió en el escenario de uno de los rescates más impresionantes de la Segunda Guerra Mundial. Ante el avance de las tropas alemanas, los soldados británicos que estaban apoyando a Francia en el campo de batalla comenzaron a retroceder para poder retirarse a las islas. La fuerte presencia de la Luftwaffe alemana y la escasez de naves de transporte pusieron en riesgo este proceso. Finalmente, y gracias a la ayuda de barcos civiles, se pudo salvar a más de 350 000 soldados.

Este suceso fue otra de las historias épicas durante la Segunda Guerra Mundial, donde se vieron acorralados más de 338000 soldados británicos. Estos vieron en el puerto galo la mejor vía de salida para una retirada que no ofrecía alternativas. Fue Dunkerque la retirada más famosa de la Segunda Guerra Mundial.

Conforme los regímenes alemán e italiano ganaban fuerza y extendían su dominio, surgían disidentes en los territorios ocupados que se oponían a su dominio. Desde Francia, Italia, Polonia o Grecia, y prácticamente en todos los países ocupados, grupos de rebeldes armados se dedicaron a sabotear desde dentro al enemigo a la espera de una oportunidad de poder hacerle frente. La popular canción italiana Oh bella ciao se convirtió en un símbolo de esta lucha y recoge a la perfección el pensamiento de los partisanos.

La guerra dejó al descubierto la debilidad de los países europeos y un mar de sangre y lágrimas. Las historias épicas durante la Segunda Guerra Mundial, reafirmaron el poder de este conflicto que generó numerosos héroes.