10 Partes más sucias de tu cuerpo que no conocías

El ombligo es toda una fuente de suciedad a pesar de que te bañes. Lo cierto es que se ubica prácticamente, dentro del cuerpo, todo un paraíso para los gérmenes. Estos no pierden oportunidad para establecer su refugio allí. Se acumulan del jabón, el sudor y de las células muertas del organismo. Por lo que hay que tener especial atención a la hora de lavarlo, así evitas enfermedades y malos olores.

Se han llegado a encontrar hasta 2 368 tipos de bacterias que pueden habitar en el ombligo. Por esta razón lávalo y sécalo bien después de la ducha, para no almacenar ningún microbio. Presta atención a cualquier cambio como enrojecimiento, picor o mal olor, ya que es muy fácil que se creen hongos.

Las manos son la parte del cuerpo que siempre está en contacto con todo objeto y superficie. Ya sea tocando el dinero, el teléfono móvil e incluso acariciando las mascotas, siempre están en contacto. Todo esto hace que las manos se conviertan en un imán para los microbios y en un refugio para acumularse. Se estima como promedio que unas 150 bacterias habitan en las manos. Este número tiende a aumentar si no existe la higiene correcta y lavado continuo de estas.

Por otro lado, las uñas se encuentran dentro de las partes más sucias de tu cuerpo. Estas acumulan gran cantidad de gérmenes y sin darnos cuenta las llevamos a la boca. Muchos centros para el control y prevención de enfermedades recomiendan lavarse las manos varias veces al día. De esta manera se evita la propagación de parásitos y bacterias perjudiciales para la salud. Con agua y jabón quedarán esas manos limpias.

Los pies se incluyen dentro de las partes más sucias de tu cuerpo y como llegan a apestar. Varias son las personas que se quejan del sudor y el mal olor en los pies. Esta situación es muy semejante al ombligo, pues ambos tienden a acumular humedad, convirtiéndose en un lugar perfecto para las bacterias. Además, esta zona solo con el lavado y la higiene no resuelve el problema: hay que tomar más medidas.

Se debe combinar la limpieza con otros elementos como el tipo de zapato y el uso de calcetines. Es recomendable usar un calzado que sea transpirable donde exista, aunque sea una mínima entrada de aire. Por otro lado, los calcetines limpios y no tan gruesos evitan las sudoraciones excesivas y la proliferación de bacterias. Estas son la causa fundamental del mal olor y pueden llegar a provocar hongos. Al igual que con tus manos lava también tus pies.

En la lista de las partes más sucias de tu cuerpo, no podría faltar la boca. En esta pueden vivir unas 615 bacterias y algunas de ellas muy dañinas. Por estas razones se hace necesario el lavado de los dientes después de cada comida, al igual que otras zonas de la cavidad oral. No solo estos se lavan, también se incluyen las mejillas, la lengua y el paladar.

Muchos son los que afirman que no lavarse la boca en todo el día equivale a no bañarse en dos semanas. Esta comparación deja claro la importancia de la higiene bucal. Por otra parte, este lugar tiene mucho contacto con las manos, ya que sin darte cuenta te introduces en dedo en ella. Si no lo sabías la saliva tiene más bacterias y parásitos que las manos y el dedo que llevaste a la boca. No te olvides de lavar los dientes 4 veces diarias, tu aliento y salud oral te lo agradecerán.

El cuero cabelludo y las axilas son de las partes más sucias de tu cuerpo. En estos se acumulan cientos de bacterias que provocan el mal olor. La cabeza es fuente de suciedad y se afirma que por cada centímetro cuadrado de piel existe aproximadamente un millón de gérmenes. Estos se alimentan de secreciones y células muertas. Resulta muy desagradable ver un cabello sucio y maloliente, por lo que debes lavarlo con frecuencia de 2 a 3 veces por semana y cepillarlo con regularidad.

Las axilas recogen cerca de 10 mil millones de bacterias, provocando un olor desagradable. Gracias al uso masivo del desodorante los problemas higiénicos de esta zona pueden pasar inadvertidos. Pero no dejan de ser un foco de gérmenes que necesita de higiene y atención. Lávalas varias veces al día y luego déjalas refrescar antes de untar el desodorante.

Seguir una rutina de limpieza ayudará no solo a tu apariencia sino a tu salud. Con estos consejos resolverás eliminar el mal olor y verte radiante:

• Ponte ropa interior y de vestir limpia todos los días.
• Lava las manos varias veces al día al igual que la cara y sécalas con una toalla limpia.
• Toma una ducha una o más veces al día, donde limpies todas las partes de tu cuerpo por igual.
• Elige y usa el desodorante que más te asiente, recuerda lavar las axilas antes de aplicarlo.
• Cepilla los dientes por lo menos 3 veces al día, para combatir el mal aliento y las caries.

Con todos estos consejos ya no te quejarás más de los olores desagradables en tu cuerpo. Mantener la higiene es fundamental.