Cómo es la visión de los animales

Muchas personas, entre ellas yo, desearían poder caminar en la oscuridad sin tropezar. ¿Te pasa igual? Adivina quiénes sí pueden… Algunos animales. 

Es más, si hay algo que podamos envidiarles, su vista es lo principal. 

La ciencia ha demostrado que una mosca común puede ver 250 imágenes por segundo. Los humanos solo vemos 60. Aplastante diferencia, ¿verdad?

¿Qué le permite al felino su estupenda visión nocturna? O ¿qué caracteriza la visión de los animales? Persigue las respuestas a continuación.

Primero, ¿qué es el iris? 

Todos tenemos retina, la cual recibe los colores y la luz que nos rodea. Luego el iris regula la penetración de luz.

A mayor luminosidad, se contrae para que su entrada no sea excesiva. Entonces, ¿en la oscuridad, qué pasa? Pues se expande para que más rayos puedan entrar.  

En los humanos se comporta de la misma manera. Los animales tienen sus iris diferentes según la especie a la que pertenezcan. 

Las pupilas de los animales son muy distintas. Algunas de ellas tienen un aspecto llamativo, como el de la manta raya. El ojo de un animal llamado sepia es muy curioso, ¿sabías que tiene forma de “W”?

Otros, como la cabra de las montañas, tienen sus pupilas como hendiduras horizontales. Asombrosa la visión de los animales, ¿verdad?     

¿Son ciertos los mitos sobre la visión de los animales? 

En este reino existen muchas especies que no tienen ningún defecto visual. A diferencia de los seres humanos, cuentan con una característica especial: la capacidad de ver en lo oscuro.

Ya pasaba la media noche y Mario dormía a pierna suelta. De pronto, ¡un ruido! Menudo susto. Sale a investigar y tropieza con todo. 

¿El intruso? 

Su propio gato. Se había lanzado desde el aparador de la cocina para atrapar al verdadero enemigo: un minúsculo ratón. 

¿Cómo su gato vió a su presa en medio de la penumbra? 

En ese momento, Mario envidió la visión de su minino.

Mientras que bajo la luz del sol la vista felina no es de 100, en la noche es diferente. En la mañana, sus ojos recepcionan más luz solar que los de los humanos. Ese es el motivo de su incapacidad visual diurna. 

La visión de los animales como las aves les permite captar imágenes más específicas. Desde las alturas, pueden ver mediante el espectro ultravioleta. 

¿Sabías que existen colores que el ojo humano no reconoce? 

Las aves sí lo hacen. 

Es una pregunta curiosa, dado que son excelentes cazadores en las tinieblas. Sus habilidades para la caza no son responsabilidad exclusiva de su vista. 

Su tacto y olfato sí que son poderosos en realidad.

Sus ojos se han adaptado al entorno acuático. Las profundidades marinas son oscuras y, por ende, sus habitantes poseen la facilidad de ver muy bien en las penumbras.

Tienen características oculares que facilitan su visión nocturna: 

• Ojos separados
• Percepción de luz ultravioleta 
• Usan la luz para captar mejor su entorno.

Las diferencias entre los conos, bastones e iris de cada especie hacen que la percepción cromática también diverja. Eso significa que no todos los animales pueden ver cada color.

Acompáñame y averigua qué ocurre con la visión de los animales.

Perciben casi todas las tonalidades. 

A que no te imaginabas que una pequeña abeja es capaz de diferenciar el verde azul del azul. Considera que hay humanos incapaces de hacerlo.

Sin embargo, no pueden percibir el rojo, por lo que es normal que lo confundan con el negro. Por otro lado, el verde y el naranja los detectan con facilidad.

Los perros no perciben algunas longitudes de ondas como las de los espectros rojo y verde. Si un canino ve sangre, lo más probable es que le parezca un líquido amarillo. 

La percepción de los gatos es dicromática. ¿Qué significa esto? Que los felinos pueden ver en dos gamas pigmentarias. 

También su vista es dicromática. Sus conos presentan una sensibilidad mayor ante los tonos entre verde/amarillo y azul con tendencia al púrpura.

¿Te has preguntado por qué los toros se enfurecen cuando ven el color rojo? 

Pues que no te engañen. El problema no está en el color rojo, sino en los movimientos que el torero hace con el capote.

Sus dos grandes ojos están conformados por 30,000 celdas. Estas se llaman “omatidios”. En cada una de ellas hay un lente con células sensibles a la luz. 

Su alta disposición al movimiento de hasta 360° las hace concentrar toda su atención hacia su presa. Eso la convierte en una de las cazadoras más certeras dentro de los insectos.

¿No sabes de qué animal se trata? Son unos primates muy pequeños. Entre los mamíferos, ellos ostentan los ojos y córneas más grandes en comparación con las medidas de su cuerpecito. 

Sus ojos están pegados a su cráneo y pesan más que su cerebro. Asombroso, ¿cierto?

Tienen los ojos más complejos dentro del reino animal. Cuenta nada menos que con 12 canales de recepción de colores. La manera en que los percibe supera a la visión de los animales en su mayoría. 

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