¿Cómo moldear el vidrio?

Entre las habilidades para moldear el vidrio hay una llamada fusión. Consiste en llevar este material a su punto más líquido y luego enfriarlo lentamente. Eso permite un resultado final con diversas texturas y formas e incluso el ensamble de unas piezas con otras. Dentro del método fusión existen 3 variantes para fabricar el cristal. 

Comencemos por una de las técnicas más famosas: el soplado. En el momento cuando derrite se introduce un tubo metálico o caña. Luego se infla dentro para crear burbujas de aire y manejarlo como se quiere. Lo puedes trabajar de forma directa así como emplear un molde de bronce o acero. La última opción se utiliza mucho para confeccionar botellas y vasos de vidrio.

La segunda modalidad de artesanía más común en el vidrio es el fusing. Se conoce como un tipo de fundición que admite unir más de dos objetos por medio del calor para conformar una sola obra. La temperatura a la cual vamos a exponer la pieza tiene dos características. El primer caso se llama Track Fusing y consiste en derretirlo en los valores de 730 y 760 grados. Un proceso que funde parcialmente el vidrio por lo que no se amalgama y conserva el volumen.

Por otro lado, si horneas el cristal entre 790 y 835 grados entonces se refiere al Full Fusing. Cuando alcanza esta temperatura se produce el fundido totalmente, las capas se unen y forman un solo grosor. Si se mantiene un tiempo prolongado en el horno caliente puede llegar a tener un espesor estable de 6 milímetros. Por eso, algunas industrias trabajan esta técnica para confeccionar tablas.

Por último, tenemos la colada que se registra como una de las formas más antiguas de moldear el vidrio. Se basa en calentar el objeto hasta llegar a la fusión y luego vaciar en un molde para lograr la figura deseada. También se le conoce como hot casting. Algunos historiadores comentan que inicialmente fue usada esta práctica por la cultura egipcia. Fundamentalmente en las esculturas de vidrio porque se pueden añadir otros objetos. Así el artesano crear varios detalles según su creatividad. 

El método de grabar en vidrio es una habilidad muy laboriosa. Consiste en desarrollar figuras y dibujos en la superficie de este material. Para lograrlo existen 3 procedimientos para conseguir buenos resultados. El primero es el grabado directo. Se realiza con un pequeño lápiz que tiene la punta de polvo de diamante y acero. De este modo se marca el cristal con el diseño y consigues trazos más lineales y nítidos.

En segundo lugar, tenemos el grabado con ácido que se le conoce también como mateado. Tienes que sumergir el vidrio en una mezcla en partes iguales de ácido fluorhídrico, clorhídrico y agua. Es una técnica bastante peligrosa por lo que se aconseja emplear gafas protectoras, guantes y mascarillas para evitar la inhalación de gases. El resultado es una pieza con más pulida y con un efecto mate.

La última variante para moldear el vidrio en frío es el grabado arenado. Se aplica un chorro a presión de grava para desgastar el material y darle un aspecto más atenuado. Esto favorece la decoración personalizada pues el cristal no queda transparente y hace contraste con el mate de la arena. Además de proteger las zonas que queremos que se vean brillantes.