Teletransportación ¿ya se logró?

Muchos hemos visto cómo se teletransportan en Star Trek y otras series de Ciencia Ficción y hemos soñado con hacerlo. Evidentemente, sería un avance tecnológico que facilita en gran medida nuestra vida diaria. Solo imagínate poder desaparecer y aparecer, como por arte de magia, en otro sitio. Eso significa el fin de los interminables recorridos en auto, barco o avión para viajar largas distancias.

Sin embargo, y a pesar de que todos hemos querido teletransportarnos en algún momento, quedan muchas dudas al respecto. ¿Realmente es posible la teletransportación? ¿Podremos utilizarla en algún momento? ¿Ya se ha logrado? Si te preguntas estas cosas, tienes que seguir leyendo, pues esto y más será respondido en el siguiente post.

Mira ahora mismo estos datos curiosos del Universo que no sabías. ¡No lo podrás creer!

¿Qué es la teletransportación?

A la teletransportación también se le llama teletransporte o teleportación y su significado literal es “desplazar a distancia”. Es un proceso para transportar objetos de forma instantánea de un punto determinado a otro. Esto, sin establecer ningún contacto físico con dicho objeto. Aunque se le ha visto sobre todo en programas de ciencia ficción, ha sido ampliamente investigado por la ciencia. 

¿Ya se logró teletransportar algo?

La verdad es que sí, la humanidad ya ha logrado efectuar la teletransportación. ¿Es como nos imaginábamos? Para nada. El experimento fue realizado en 2019, por físicos cuánticos de dos universidades, una austriaca y una china. Estos probaron que es posible teletransportar estados cuánticos complejos de alta dimensión.

Antes, en otros experimentos, se había logrado teletransportar ciertas informaciones de una partícula. La Academia de Ciencias austriaca y las universidades de Viena y de Ciencia y Tecnología de China lograron más. Llegaron a terminar el proceso de teletransportación de un estado cuántico tridimensional. 

¿Qué es un estado cuántico tridimensional? Pues es un grupo de características de una partícula muchísimo más complejo de lo que antes se había alcanzado. Estos científicos llegaron a teleportar el estado cuántico en tres dimensiones de una partícula de luz llamada fotón. La llevaron, por medio de la teletransportación, de un punto a otro distinto y lejano.

Antes, mover un estado cuántico en tres dimensiones por teletransporte no era más que una teoría. No se había logrado demostrar. Lo más cercano que se había conseguido había sido mover características mucho menos complejas de una partícula. A lo máximo, estados de dos niveles, como información conformada en código binario con valores de 0 y 1.

La teoría de que era posible la teletransportación cuántica multidimensional proviene de la década del 90 del siglo pasado. Necesitó más de veinte años para comprobarse y no fue tarea fácil. Los encargados del hito contaron que necesitaron crear un método experimental y, además, desarrollar los equipos tecnológicos necesarios. Esto les tomó nada menos que años enteros de trabajo y dedicación total.

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¿Es posible teletransportar a un humano?

Con los conocimientos científicos con los que cuenta la especie humana actualmente, no se puede teletransportar a una persona. En el futuro lejano, o quizás hasta relativamente cercano, quién sabe. Muchas cosas que antes parecían imposibles se han logrado gracias a la ciencia. Sin embargo, las barreras que lo evitan son significativamente difíciles de franquear.

Con la teletransportación cuántica, que ya conoces, se ha logrado mover cierta información de una partícula. Aún, ni siquiera, ha sido posible transportar la partícula completa. Entonces, al pensar en teleportar objetos inanimados o seres vivos la complejidad se acrecienta. Estos están formados por gran cantidad de partículas y, además, por las interacciones entre ellas.

Hacerlo con un objeto inanimado sería más fácil. Se haría necesario desintegrar por completo. Sus átomos, moléculas y todo lo demás se rompería hasta ser partículas y la información de estas se movería. Al llegar al lugar de destino, todo se compondría y el objeto quedaría como antes. Ten en cuenta que, con los logros conseguidos hasta ahora, aun esto es de una dificultad extrema. Sin embargo, en el caso de seres vivos sería mucho más difícil.

Centrémonos en las personas. Los seres humanos no solo somos un conjunto de átomos, moléculas y todo lo demás. Contamos, por ejemplo, con un cerebro, donde las interacciones entre cada parte son complejisimas. Todavía no entendemos del todo cómo interactúan para crear pensamientos, recuerdos o sentimientos. 

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Esas interacciones deberían ser descompuestas y vueltas a armar en el sitio de destino como mismo estaban. Sí, habría que desintegrar también a un humano y luego volverlo a armar, dicho de modo simple. Ya en este punto, quizás no te agrade saber que te van a descomponer por completo. Y aún si no te importa ese pequeño detalle, la ciencia está muy lejos de lograrlo.