¿Cuál es la capital mundial de los cuentos de hadas?

Andersen, nacido en 1805, creció en Odense, a dos horas al oeste de Copenhague. Por tanto esas calles inspiraron sus mejores obras. Tras años de construcción, un museo de 53,6 millones se inauguró en la ciudad natal de Andersen. El H.C. Andersen’s Hus lo diseñó el arquitecto japonés Kengo Kuma. Él escenificó los cuentos de hadas del autor a través de una serie de instalaciones de luz, sonido y arquitectura. Al respecto Lübker, el director creativo, comentó: “Este mundo de cuento de hadas no es lineal, sino una curva. Se trata de esconder cosas. Así es como se presenta el museo, a través de espacios secretos y curvas para mantenerte en vilo”.

Incluso hay un sitio que recuerda el anhelo de la Sirenita de formar parte del mundo de arriba. Los espectadores ven el cielo a través de un depósito de agua transparente. En la planta superior del museo, puedes crear pociones mágicas, hacer teatro de marionetas y construir un nido de cisnes. Todos los lugares van acorde al título de la capital mundial de los cuentos de hadas

“La sirenita”, el monumento, solo mide un metro de altura. Esta se esconde entre el bullicio de los cruceros. En el puerto, nada se ve pacífico pero en la capital de las hadas, no todo es lo que parece. Una vez hace mucho tiempo un pescador fue llevado por los cantos de esa pequeña sirena de bronce. El autor de esa historia que ha pasado por generaciones tiene un museo cerca, como se mencionó antes.

Sin dudarlo, es el gran símbolo de Copenhague. Esta historia de la protagonista del cuento clásico de Hans Christian Andersen resulta bastante trágica. Debido a ello se refleja en la famosa escultura de Edvard Eriksen, un homenaje a la bailarina Ellen Price. Se negaba a posar desnuda, así que Eriksen tuvo que coger a su mujer de modelo. Visitar el monumento tiene que estar en tus planes para la ciudad danesa. La verás a distancia y comprobarás porqué le llaman sirenita. Otro ejemplo de las bellezas en la capital mundial de los cuentos de hadas

Como se esperaba el Tivoli Copenhague resulta uno de los símbolos de la ciudad. Los jardines te deslumbran desde el momento en que lo ves. Sus atracciones son de las actividades que no puedes dejar de hacer. Está situado al norte de la ciudad, en un bosque lleno de ciervos y árboles centenarios. Posee tanta belleza que a Walt Disney le encantó el parque Tivoli en su visita. Sirvió de ejemplo para crear su franquicia. Los habitantes de Copenhague lo toman de motivo de orgullo.

El parque mezcla atracciones de feria, luces y magia, capaces de hacer que sonrías. Encontrarás salas de espejos, títeres, teatros al aire libre, restaurantes, jardines y una sala de conciertos que se ilumina por la noche. Este es famoso en todo el mundo y aparece en muchas películas. Los jardines se han vuelto de los más visitados en la capital. Aunque gran parte los frecuentan durante el verano existe un momento mejor. El Tívoli se viste de gala para Navidad y Fin de Año. Se vuelve toda una celebración de la luz que te encantará.

Verás cientos de luces que resaltan los jardines en medio de la oscuridad del invierno. Disfrútalo cerca de una de las hogueras en el jardín o caliéntate las manos junto a la chimenea del Bar Nimb.