Devastadores ataques en el agua ¡¡¡TEN MUCHO CUIDADO!!!

El agua es un entorno lleno de belleza y atracción, pero al mismo tiempo puede resultar muy peligrosa e impredecible. Es por ello que los ataques en el agua son bastante infortunados y, en muchos casos, mortales. Para prevenir este tipo de situaciones, es ideal que te mantengas debidamente informado en todo momento.

Tiburones, el peligro acechante bajo la superficie

Entre las criaturas más temidas de todo el océano se encuentran los tiburones. Sus ataques no son los más comunes en las zonas costeras, pero cuando ocurren, por lo general, acaban siendo letales. 

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Por esta razón, debes tener en cuenta que estos animales suelen ser mucho más activos durante determinadas horas del día y en ciertas condiciones del clima. Estudia adecuadamente las zonas de mayor riesgo de ataques en el agua por parte de los tiburones. Intenta por todos los medios, conservar una distancia prudencial cuando decidas salir a nadar.

Si se te hace inevitable la cercanía de un tiburón, es importante que mantengas la calma y trates de alejarte muy despacio. No huyas desesperadamente ni realices movimientos bruscos para no llamar su atención. En caso de un ataque inminente, puedes intentar defenderte golpeando su hocico, ojos o branquias. Esto no ahuyentará al animal, pero lo aturdirá durante algunos minutos, con lo cual ganarás algo de tiempo extra para escapar de uno de los ataques en el agua más aterradores. 

De cualquier modo, siempre es preferible que evites nadar en aguas frecuentadas por tiburones. Si fuera necesario hacerlo, utiliza medidas de protección tales como jaulas o trajes especiales.

Medusas belleza venenosa, ataques en el agua

No has de tener dudas en cuanto a la deslumbrante belleza de las medusas. Sin embargo, también es relevante que estés al tanto del alto peligro que representan. Este es uno de los ataques en el agua que podrían parecerte más inofensivos, aunque en realidad, suelen ser nocivos en extremo. Sus tentáculos te ocasionan dolores intensos que, de no ser controlados en tiempo, pueden provocarte la muerte.

Si eres picado por una medusa, retira los tentáculos de tu piel lo más rápido que puedas. Procura lavar la herida con agua salada pues, si empleas agua dulce, los síntomas que causa la picadura se agravan.  Para que reduzcas la intensidad del dolor, aplica hielo o compresas frías sobre la zona dañada. Además, se recomienda el uso del vinagre para neutralizar el veneno. 

En caso de que presentes lesiones de gran tamaño o si experimentas otros síntomas inusuales, acude inmediatamente al centro de salud más cercano. Lo fundamental es que evites, siempre que sea posible, el contacto con estos animales. Ten presente que en algunas zonas geográficas son más comunes que en otras, especialmente en determinadas épocas del año. No pongas en riesgo tu salud por algunos minutos de deleite visual.

Rayas, cuidado con la cola

Otros animales marinos que te sorprenden por su hermosura son las rayas, aunque, de igual manera, sus ataques en el agua podrían ser muy desagradables. Estas criaturas habitan en mares y océanos de todo el planeta, y están dotados de una cola con elevadas concentraciones de veneno, que puede terminar con tu vida en un tiempo muy reducido. Algunas especies, incluso, tienen incorporadas espinas venenosas a lo largo de toda la cola, lo cual resulta mucho peor y más tenebroso.

Si te encuentras en el agua y visualizas uno de estos animales, asegúrate de mantener una distancia segura y evita pisarlas, tocarlas o siquiera rozarlas. En caso de que seas atacado por alguna raya, lava bien el área afectada con abundante agua caliente y preferiblemente salada. Si las afecciones son graves busca atención médica inmediata, en aras de preservar tu salud.

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Cocodrilos, la clave está en la distancia

Los cocodrilos son criaturas peligrosas que abundan en ríos y lagos del mundo entero. Una de las cuestiones más aterradoras en cuanto a sus ataques en el agua está relacionada con su capacidad para ocultarse, pues podrías estar cerca de uno y no darte cuenta desde el primer momento. Por eso es fundamental que te mantengas atento todo el tiempo, además de informarte bien con respecto a las zonas más riesgosas y vulnerables ante el acecho de estos animales.

Conserva la tranquilidad en caso de detectar la presencia de un cocodrilo muy cerca de ti. Haz todo lo posible por alejarte lentamente, hasta que alcances una distancia prudencial. De ser atacado, intenta golpear sus ojos u hocico para que prosigas con tu escape.  Ten en cuenta que las mordeduras de estos animales muchas veces son mortales o, cuando menos, devastadoras, debido a la inmensa fuerza y potencia de su mandíbula.

Además, debes saber que también existen cocodrilos de agua salada, los cuales son mucho más peligrosos. Se trata de los reptiles más grandes del planeta, muy frecuentes en regiones de Australia, Asia y África. Son conocidos, particularmente, por su enorme agresividad e instinto de ataque contra los humanos.

Ballenas, ataques impredecibles y devastadores

Aunque las ballenas son animales majestuosos y pacíficos, podrían ser bastante peligrosas si perciben alguna amenaza o molestia. Es por ello que debes mantenerte alejado en caso de que te halles en una zona donde abunden estos animales. Evita siempre hacerlas sentir acorraladas.

Los ataques en el agua de una sola ballena pueden resultar terriblemente devastadores. Por ejemplo, las ballenas grises y las jorobadas tienen habilidades especiales para ejecutar saltos e impresionantes acrobacias. Ahora, una vez que se sienten amenazadas, utilizan esta capacidad para embestir, sin dificultad alguna, tanto a personas como a embarcaciones completas.  

Corrientes, el peligro oculto

Los únicos ataques en el agua a los que temer no son necesariamente de animales. Las propias corrientes marinas suelen ser un enorme peligro, pues te arrastran lejos de la costa en cuestión de segundos.

Es por eso que se recomienda que evites las zonas de aguas turbulentas o de tonalidades más oscuras. No nades contra la corriente, es más fácil escapar si nadas persistentemente en paralelo a ella. En caso de que no puedas escapar, flota hasta que seas rescatado o la corriente disminuya.