¿Qué costumbres de la Antigua Roma aún se conservan?

¿Eres de los que creen que la Historia ancestral pertenece solo a los museos? ¿O consideras que somos herederos de civilizaciones anteriores? 

Cualquiera que sea tu caso, hoy te revelaremos en qué se parece nuestra sociedad a las costumbres de la Antigua Roma. ¡Prepárate para ser sorprendido!

El emperador Julio César fue uno de los que se empeñaron en eliminar el vello corporal. No era solamente un ritual de higiene y belleza, sino que demostraba jerarquía y estatus social. ¿La razón de esto? Porque era un lujo que podían darse solo los que tuvieran suficiente tiempo y recursos.    

Como parte de las costumbres de la Antigua Roma, la homosexualidad, sobre todo masculina, gozaba de cierta libertad. No era mal visto que un ciudadano romano mantuviera relaciones con esclavos o algún muchacho de menor edad. Como ejemplo tenemos al emperador Adriano, que se enamoró del joven Antínoo. 

No obstante, el escritor Paco Álvarez afirma que, en cuanto al sexo, era bastante parecida a la sociedad occidental actual. De modo que las múltiples referencias a orgías y bacanales puede que no fuesen como lo pinta Hollywood. De igual manera, en Roma existían la prostitución y la pornografía.   

Muchas personas piensan que fue el cristianismo quien inculcó el matrimonio. Sin embargo, en la Antigua Roma las personas también se casaban. Generalmente no era por amor, sino por motivos económicos. 

En el siglo I A.C, en tiempos del emperador Augusto, surgió una ley que permitía el divorcio por voluntad de uno de los cónyuges.

Es lógico que una gran civilización del pasado imprima una huella respecto a elementos significativos como la política, etc. Ahora, ¿será posible que  pequeñas costumbres de la Antigua Roma perduren tanto tiempo después? 

En efecto, hace dos mil años los romanos ya reciclaban. Le entregaban los cristales de los artículos domésticos rotos al vidriero ambulante. Esa persona se encargaba de llevarlos a la fundición, donde se elaboraban nuevos objetos. 

Es necesario aclarar que no lo hacían para cuidar el medio ambiente. Era más bien una manera de reutilizar materiales.

Actualmente el Internet ha posibilitado el surgimiento de un gran número de aplicaciones de mensajería. 

¿Chats instantáneos entre las costumbres de la Antigua Roma? ¡No tanto así! Aunque hace dos milenios los romanos se las ingeniaron para brindarles a sus ciudadanos un servicio similar. 

Usaban unas tablillas de cera que se guardaban en un estuche de madera. Las personas escribían un texto y se lo entregaban al mensajero. Este era el encargado de transportarlo hacia su destinatario. Así se establecían largas conversaciones. 

Lo más curioso de todo es que muchas veces empleaban dibujos en sustitución de las palabras. ¿Te parece familiar? Seguro esto te recuerda a cuando usas emoticonos en tus chats. Uno de los dibujos más frecuentes era el de un ánfora, para sustituir la palabra vino.