Connect with us

Curiosidades

¿Por qué compararte con los demás acaba con tu autoestima?

Tu vecino tiene un auto mejor que el tuyo. Tu compañero de trabajo es más apuesto. Tu pareja es más inteligente. Si pasas el día pensando así tienes un problema. El compararte con los demás probablemente te haga sentirte muy pequeño en un mundo de gigantes. ¿Significa que no vales nada? ¿Cuántos problemas puede causar el simple hecho de compararnos con otros? ¿Cómo solucionarlos? Entérate a continuación.

Tu vecino tiene un auto mejor que el tuyo. Tu compañero de trabajo es más apuesto. Tu pareja es más inteligente. Si pasas el día pensando así tienes un problema. El compararte con los demás probablemente te haga sentirte muy pequeño en un mundo de gigantes. ¿Significa que no vales nada? ¿Cuántos problemas puede causar el simple hecho de compararnos con otros? ¿Cómo solucionarlos? Entérate a continuación.

Te mostramos algunas razones por las que deberías valorar más a tu hijo mayor

¿Por qué nos comparamos con otras personas?

compararte con los demás 3
¿Por qué nos comparamos con otras personas?

Existen muchas razones por las cuales puedes llegar a compararte con los demás. Y estas comparaciones pueden darse con atributos físicos, formas de comportarse o muchos otros elementos. Casi siempre se hacen para ver en otras personas lo que uno mismo no ha logrado. Eso que te encantaría poder alcanzar. Van muy ligadas a la idea de perfección, que es muy peligrosa. Querer ser perfecto puede llevarte a serios problemas físicos y mentales y, en verdad, nunca podrás lograrlo. No es más que algo abstracto, un camino sin fin.

Efectos de las comparaciones excesivas en tu autoestima

Ya sabes que compararte con los demás suele venir ligado a notar qué tienen otras personas y tú no. Justo ahí está el primer problema. No estás valorando aquello que sí has podido lograr y lo que sí tienes. Por tanto, te lleva simplemente a rechazar quién eres. En otras palabras, te limita. No te ayuda de verdad a cambiar aquello con lo cual te sientas inconforme.

Además, cuando ocurren estas comparaciones se suele idealizar a la otra persona. Es lo que leíste antes sobre la supuesta perfección. Tu mente los coloca como seres perfectos –cuando no lo son– y por tanto superiores a ti. Ello puede provocarte un importante complejo de inferioridad. No hace falta explicar que si te sientes menos que los demás tu autoestima se va por los suelos.

Otro factor que aporta a la nocividad de este hábito es el compararte con los demás desde lo superficial. Esto no significa solo desde lo físico, sino hacerlo desde cualquier aspecto sin tener en cuenta todo el panorama. Por ejemplo, piensa que un compañero de trabajo entregó su informe en tiempo y tú no. Puedes pensar que es mejor que tú, que no mereces estar a su nivel y una larga lista de cosas por el estilo. Sin embargo, no tienes en cuenta por qué no lo lograste. Quizás él estuvo libre toda la semana y tú estuviste en veinte reuniones.

Pon en práctica estos consejos útiles para lidiar con la ansiedad

Sigue estos consejos y deja de compararte con otros

compararte con los demás 2
Observa y reflexiona sobre tu vida

Hay una lista de acciones que puedes realizar para abandonar la dañina práctica de compararte con los demás. El primer paso es detectar los momentos precisos en los que lo haces. Reflexiona no solo sobre cuándo realizas las comparaciones, sino también en qué tipos de contextos. Pregúntate si realmente buscas algún objetivo específico con ellas.

¿Ya detectaste esos instantes en los cuales te empiezas a comparar con otras personas? Ahora respóndete a ti mismo, primero, si lo haces demasiado, y después si hacerlo te está causando problemas. No todas las comparaciones son malas. Depende de ti saber si están dañando tu autoestima. Solo pregúntate si en verdad te ayuda a lograr lo que quieres. Si no es así, entonces seguramente te limita.

Observa y reflexiona sobre tu vida. Todos los aspectos son importantes. Si ya conoces tus carencias, dedícate a descubrir qué tienes de bueno, en qué puntos eres fuerte. Esto te permitirá ser justo contigo mismo y valorarte más. Ya no te compararás desde una posición de completa inferioridad. Y en aquellos e elementos en los que sí estás por debajo, podrás analizar más fríamente el por qué. Solo así podrás superarte personalmente. Recuerda que la comparación más importante es contigo mismo.

Asegúrate de que tus objetivos de vida provienen de tus intereses y aspiraciones reales. No te traces metas que en verdad no te interesan por tal de ganarle en algo a los demás. Recuerda que no tienes que iniciar una competencia malsana con nadie. Hacerlo, a fin de cuentas, solo te llevará a una situación de dar y recibir malas acciones todo el tiempo. Además, hundirá más tu autoestima si resulta que no logras ganar esa batalla imaginaria.

Por último, no debes compararte con los demás por lo que publican en redes sociales. En el espacio virtual todo el mundo es feliz, se divierte las 24 horas y tiene la mejor vida. Pero todo eso son solo apariencias, es una especie de alias digital de cada persona. No es para nada la realidad. Por tanto, comparar cómo vives tú en verdad con cómo dice que lo hace alguien en redes es perjudicial.

Estas son las 6 cosas que necesitas saber si te quedas encerrado en un ascensor

¿Cómo levantar tu autoestima más allá de evitar las comparaciones dañinas?

compararte con los demás 1
Por un instante, olvida tus defectos

Lograr esto lleva un gran trabajo de introspección. Debes ver lo que está mal en tu forma de pensar sobre ti mismo y tener voluntad para cambiarlo. Dejar de compararte con los demás es un buen primer paso, pero no el único. Existen otros consejos que te ayudarán a subir tu autoestima y, por tanto, a ser una persona feliz.

El primero es frenar esos constantes pensamientos negativos sobre ti. Por un instante, olvida tus defectos. Busca cuáles son los elementos positivos que los contrarrestan. Cada vez que notes que estás criticándote con mucha rudeza, cambia rápido a halagarte por algo. ¿No te queda bien ese atuendo? ¡Pero qué hermoso se te ve el cabello hoy! Así funciona. También puede ayudarte anotar todos los días tres cosas buenas sobre ti.

Piensa que todo error es una oportunidad para aprender. Tienes que aceptar que alguna vez harás algo mal. Le pasa a absolutamente todos los seres humanos. Cuando te ocurra, no te autocastigues ni sobredimensiones las cosas. Simplemente tómalo como parte del aprendizaje para mejorar lo que sea que hagas.

Haz todo el tiempo cosas nuevas. No te detengas en una sola aptitud que adquiriste. Intenta llevarla más allá, combinarla con cosas afines. Mantente todo el tiempo en contacto con tus fortalezas, pero mezclándolas con otras habilidades que te resulten desconocidas. Cuando empieces a tener nuevas destrezas te sentirás orgulloso.

Ten claro lo que puedes cambiar y lo que no. Si hay algo que no te gusta de tu persona y es posible corregirlo, trabaja en ello. Es una buena forma de subir la autoestima, porque cuando lo consigas te sentirás súper bien. Sin embargo, ten cuidado. No te obsesiones con lograrlo ni recurras a métodos que puedan terminar siendo perjudiciales.

Como todo ser humano, eres especial por lo que te diferencia de los demás. Abandona esas comparaciones paralizantes que te impiden alcanzar tus sueños. Valora tus logros por pequeños que sean. Descubre aquello en lo cual puedes destacar aunque nadie a tu alrededor te sirva de referente. Vive feliz, atrévete a ser tú mismo.

Click to comment

You must be logged in to post a comment Login

Leave a Reply

Trending