Salud

Ómicron: El virus con la propagación más rápida de la historia

¿Qué la diferencia de sus versiones anteriores? Fue detectada hace poco más de un mes y ya se ha propagado por todo el mundo, desplazando así a la variante Delta.

A finales de 2021, la llegada del nuevo coronavirus puso al mundo de revés. Desde entonces vivimos en un constante déjà vu. Cuando la vida cotidiana comienza a parecerse a cómo era antes y aprendes a vivir en la “nueva normalidad”, aparece una variante que hace saltar las alarmas.

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La ciencia lo confirma: la propagación más rápida de la historia

Según un estudio reciente, Ómicron se transmite más rápido no sólo que otras variantes del SARS-CoV-2, sino que también del sarampión, considerado hasta el momento como uno de los virus más infecciosos.

En caso de no haber sido inmunizada, una persona con sarampión puede contagiar a otras 15 como promedio; pero deben transcurrir 12 días para que estos nuevos infectados puedan transmitir el virus. A esto se le llama tiempo de generación, y es el elemento clave del análisis.

En el caso de Ómicron, una persona infecta a otras seis como promedio, pero su tiempo de generación es de cuatro o cinco días. Visto así, un solo contagiado puede generar otros 216 nuevos casos en el mismo período de tiempo, lo cual lo convierte en el virus de más rápida propagación de la historia.

Es por ello que el doctor Roby Bhattacharyya, experto en enfermedades infecciosas del Hospital General de Massachusetts, no duda en afirmar que esta variante “no tiene rival”. Otros especialistas también se declaran sorprendidos con la rapidez con que se expande, y si lo comparas con otras grandes epidemias de la historia, verás claramente por qué.

La peste negra del siglo XIV y el cólera del siglo XIX tienen en común no sólo que fueron originadas por bacterias, sino que además demoraron años en esparcirse por el mundo entero. Por otro lado, la gripe rusa de fines del siglo XIX atravesó el planeta en solo tres meses, al igual que la variante original del nuevo coronavirus encontrada en Wuhan hace dos años.

Pero Ómicron ha superado a todas las pandemias anteriores, y en apenas un mes ya ha llegado a cada punto del orbe.

Ómicron desata un “tsunami” de contagios

En las últimas semanas, numerosos países marcan nuevos récords de contagios, por lo que la OMS alerta sobre un “tsunami” de nuevos casos. Y es que al ser más infecciosa y coexistir con la variante Delta, Ómicron ha generado un aumento exponencial desmedido que amenaza con colapsar el sistema sanitario.

Países especialmente de la región europea, así como Estados Unidos, Bolivia y Argentina ya registran cifras diarias superiores a los de la anterior oleada del coronavirus. Si bien el riesgo a nivel mundial continúa siendo muy alto, afortunadamente el número de fallecidos sigue en descenso en las últimas semanas.

No obstante, varias naciones ya retoman algunas medidas que habían sido levantadas meses atrás. Cancelación de viajes y festejos, eventos sin público, uso obligatorio de mascarillas en supermercados, cierre parcial de bares y discotecas…el déjà vu parece comenzar otra vez.

¿Qué sabemos hasta el momento sobre esta nueva variante?

Ómicron 4 — Los malestares incluso podrían lucir como los de una gripe común

Ómicron se presenta como una variante más contagiosa, pero con síntomas más leves. Hasta el momento, todo apunta a que afecta menos a los pulmones y más a las vías respiratorias superiores, lo cual podría explicar sus altos niveles de transmisión y baja letalidad.

En el caso de las personas ya vacunadas, los malestares incluso podrían lucir como los de una gripe común. Los síntomas más notables son la irritación y dolor en la garganta, aumento de la secreción nasal, estornudos, tos y fiebre. También se puede experimentar cansancio durante un par de días, dolor de cabeza, dolores musculares y sudores nocturnos.

Se ha logrado identificar además un nuevo síntoma que pasaba desapercibido y que aparece incluso antes que los demás: la afonía, o voz ronca. Sin embargo, la pérdida del olfato y gusto tan características de las primeras variantes, se aprecian mucho menos en esta.

Como las vacunas no proporcionan total inmunidad y no se sabe con certeza cuán efectivas son frente a Ómicron, se recomienda seguir implementando las medidas tradicionales para frenar su propagación. El distanciamiento social, el uso de mascarillas, la desinfección de manos y evitar lugares excesivamente concurridos o cerrados, siguen siendo tan efectivos como el primer día.

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¿Cuántas variantes preocupan en la actualidad?

Una variante puede ser considerada “de preocupación” cuando se ha comprobado un aumento de los índices de contagio, menor efectividad de los tratamientos, mayor número de pacientes hospitalizados o fallecidos, entre otros parámetros.

No necesariamente una variante nueva del SARS-CoV-2 es más peligrosa que las anteriores. El factor común entre las actuales variantes de preocupación es que todas fueron detectadas en sitios donde el índice de inmunización era muy bajo, lo cual hace que se transmita con más facilidad.

Alpha (Reino Unido, septiembre 2020)

Ómicron 3 — En el momento de ser descubierta, aún no había comenzado la campaña de vacunación

Conocida como la variante británica, esta fue la primera en predominar en la gran mayoría de los países, especialmente en Europa, Estados Unidos e Israel. En el momento de ser descubierta, aún no había comenzado la campaña de vacunación lo cual desencadenó una gran ola.

Beta (Sudáfrica, mayo 2020)

Se ha demostrado que es más contagiosa que variantes anteriores, y puede infectar tanto a personas que ya se han curado del coronavirus como a personas vacunadas. Tiene además la particularidad de haber surgido en una región donde apenas el 25% de sus habitantes han sido vacunados.

Gamma (Brasil, noviembre 2020)

Ómicron 2 — Análisis de sangre revelaron que podría evadir en cierta medida las respuestas inmunitarias naturales

Cuando fue detectada, solo un 2% de la población brasileña había culminado su esquema de vacunación. Más tarde, análisis de sangre revelaron que podría evadir en cierta medida las respuestas inmunitarias naturales y las creadas por las vacunas.

Delta (India, octubre 2020)

Fue descubierta en uno de los países más poblados de todo el planeta, y en ese momento su población totalmente vacunada no superaba el 3%. Terminó desplazando rápidamente a las variantes anteriores a nivel mundial.

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Ómicron (Sur de África, noviembre 2021):

Con 32 mutaciones en la proteína pico, ya se ha impuesto como la dominante del covid-19. Aunque no se ha demostrado, este peligroso cambio en la estructura del virus podría suponer una nueva amenaza para la inmunidad desarrollada por las vacunas.