El ayuno intermitente ¿Es tan beneficioso como nos han dicho?

El mundo cuenta con grandes defensores y detractores del ayuno. Es una práctica que se ha vuelto un poco controvertida. Este estilo de vida permite activar mecanismos propios para la obtención de energía celular.

Un artículo publicado en The New England Journal of Medicine se repasan algunos de los estudios fundamentales sobre este tema. Además de valorar los beneficios neurológicos, oncológicos, cardiovasculares, entre otros.

Lo más relevante en el ayuno intermitente es la seguridad de su uso en todo tipo de personas. No importa si estás enfermo o en forma, te aconsejo la lectura de este artículo. Parece un tema difícil, pero te aseguro grandes resultados.

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Qué es el ayuno intermitente

Intermitteng Fasting o ayuno intermitente se considera un modelo nutricional. Es una forma de vida basada en períodos de abstinencia en la ingestión de alimentos. También es una estrategia que ofrece muchísimas ventajas al organismo y a la salud en general.

Qué tipos de ayunos existen

Para algunos esta práctica es común y para otros es un método a evaluar. Pero la realidad es la siguiente: estos períodos de ayuno se alternan con la ingestión de alimentos. Por tanto, tu cuerpo no sufrirá ninguna afección. Los siguientes son los más conocidos:

• 16/8: radica en ayunar 16 horas y luego alimentarte durante 8 horas.
• 1/1: comer un día sí y al siguiente no. Se permite tomar bebidas sin calorías como el té y el café sin azúcar.
• Ayunar 24 y 48: consiste en períodos de 24 y 48 horas de ayuno respectivamente. 
• 12/12: este tipo de ayuno equivale a comer con una distancia de 12 horas.
• 5/2: durante 2 días se reduce la ingesta de calorías de unas 500 a 600 al día y luego 5 días comer lo que quieras. No es un ayuno consecutivo.
• Saltarse las comidas: quiere decir que debes omitir las comidas en varias ocasiones en el día.
• Ayuno del guerrero: este es el extremo pues solo comes algunas porciones enfocadas en frutas y vegetales y luego ingieres una comida grande en la noche.

Cuáles son los beneficios del ayuno

El ayuno intermitente brinda innumerables beneficios. Mejoran el colesterol, reducen los triglicéridos y disminuyen el crecimiento de células cancerígenas. Pero estos no son los únicos. A continuación, te explicamos cuáles son.

Ayuda a reducir peso

Normalmente cuando ingieres alimentos el cuerpo comienza a procesarlo en las horas siguientes. Esto provoca que quemes la energía que has consumido como el glucógeno de los músculos o la glucosa de la sangre. Por tanto, la grasa que comas se almacena en tu organismo.

En cambio, al tener un estado de ayuno la energía que se consume se extrae de la grasa alojada. Además, si tu intención es bajar de peso puedes acelerar este proceso con ejercicio. Tu cuerpo se verá obligado a usar la única fuente disponible.

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Proporciona estabilidad al sistema nervioso central

Se puede demostrar mediante investigaciones científicas cómo el ayuno intermitente protege el cerebro. Con la abstinencia en días alternos se cuidan las neuronas de la disfunción y la degeneración. Entre estos trastornos neurológicos podemos mencionar: el Alzheimer, el Parkinson, la epilepsia, etc.

El ayuno escaso maximiza el riesgo de trastornos neurodegenerativos y psiquiátricos. Además de proporcionar energía alternativa que se involucran con la resistencia del estrés celular. Por otro lado, combinado con el ejercicio aumentan las enzimas antioxidantes que protegen los nervios contra el estrés. 

Permite acelerar el metabolismo

El ayuno intermitente en periodos cortos ayuda a mejorar tu metabolismo. Es mucho más eficaz que restringirte de calorías en plazos largos. También ofrece la ventaja de eliminar los desechos y toxinas que se acumulan al ingerir alimentos.

Para las personas que tienen un sistema digestivo lento es muy importante el ayuno. Le ofrece al estómago, vientre e intestinos un descanso. Con esto logras regular la función intestinal y se limpian los órganos internos para un metabolismo más rápido.

Ofrece mejoras en el hábito alimenticio

¿Cuándo fue la última vez que tu cuerpo sintió hambre de verdad?

En ocasiones puede que sientas apetito, pero en realidad puede ser un antojo psicológico. Por eso, el ayuno intermitente te ofrece cambiar tu actitud con relación a la comida. Podrás determinar y entender señales reales de lo que tu cuerpo necesita.

Fortaleces el sistema inmunológico

Científicos de la Universidad del Sur de California realizaron una investigación sobre el poder del ayuno. El tema central se enfocaba en conocer si realmente se puede regenerar el sistema inmunológico. Solo aplicarían el estudio por tres días y los resultados fueron asombrosos.

Cuando el cuerpo siente hambre las células madres producen más glóbulos blancos para contrarrestar las infecciones. Los daños del sistema inmunológico se eliminan durante el ayuno intermitente. 

Además, un estudio extra demostró que pacientes con cáncer pueden evitar los efectos de las quimios con abstinencia. Por lo tanto, el ayuno ofrece beneficios tanto para lo externo como lo interno.

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Mejora el nivel cardiocirculatorio

Varios estudios relacionan el ayuno intermitente con la mejoría del sistema cardiovascular. Muchos coinciden en la disminución de la presión arterial, el colesterol y del aumento del tono parasimpático.

Durante los períodos de abstinencia se regulan los niveles de TMAO. Es un óxido de amina que produce la microbiota intestinal por exceso de trimetilamina. Este cambio tiene gran importancia clínica como un mecanismo con potencial para la salud cardiovascular.

Consejos para practicar el ayuno intermitente

Ya vimos que el ayuno intermitente es tan beneficioso como nos han dicho. Por eso, queremos compartir algunos consejos finales sobre este estilo de vida. Te sentirás en forma y tu organismo te lo agradecerá.

• No te obsesiones con la comida.
• No abuses de la comida luego de ayunar.
• Relájate y descansa mediante actividades como el yoga.
• No olvides el descanso. La falta de sueño aumenta el peso corporal.
• Bebe muchos líquidos como agua, té o café sin azúcar durante todo el día.
• Modifica tus hábitos alimenticios. Disfruta de comida sana, saludable y equilibrada.
• Solo después de los entrenamientos es que debes disfrutar de comida sustanciosa.
• Antes de comenzar el ayuno intermitente consulta un nutricionista o un médico especializado en este campo.
• Entrena con regularidad mediante ejercicios de fuerza e ingiere proteína para evitar pérdida de masa muscular.
• No te desanimes cuando sientas hambre. Ten paciencia. Solo necesitas habituar al organismo con este nuevo método.