Luchadores: El sacrificio que exhiben sus músculos

Muchas veces no somos conscientes del trabajo, esfuerzo y sacrificio que hacen los que practican este deporte. El alto riesgo de lesiones, los constantes viajes, los problemas de salud, entre otros. Además de los eventos, shows, promociones, entrenamientos, etc. En esta ocasión te presento algunos aspectos que te darán una mayor vislumbre de estos seres humanos.

Comencemos por las lesiones físicas, al ser un deporte de contacto exponen su cuerpo frecuentemente. Esto conlleva a que pueden lastimarse la columna, rodillas y sufrir también desgastes en los codos. Por otro lado, poseen una economía inestable. Estas actividades no son las más pagadas y fluctúan con frecuencia. Por ejemplo, en el año 2000 los ingresos bajaron porque los aficionados preferían verla en televisión.

Los luchadores viven en un mundo comparativo y lleno de envidia. Aún más si eres hijo de algún legendario luchador. Un aspecto importante y a la vez complicado es el abucheo de los espectadores. Es reconfortante cuando el público agradece y te reconoce mediante los aplausos. Aunque también es triste cuando pasas por momentos incómodos de insultos y groserías.

Por el contrario, tienen un tiempo muy limitado. Si bien es cierto que la familia es lo primero los luchadores en constante gira no disfrutar de ella como quisieran. Por último, existen muchos prejuicios en la sociedad sobre los luchadores. Muchos creen que para ser un luchador no es necesario estudiar. Sin embargo, algunos de los mejores están graduados en carreras profesionales como Diseño Gráfico, Odontología, etc.

Tener algo más de fuerza no te cataloga como un buen luchador. Para ello, es importante dominar cada aspecto que te lleve a superar las debilidades. Un peleador debe tener en cuenta varios detalles como una buena base. Es necesario un fundamento firme en correspondencia con la actividad que se va a ejecutar. Por ejemplo, si practica artes marciales debe tener una base correcta de maniobra en este campo.

En segundo lugar, está la resistencia física porque los buenos luchadores trabajan fuertemente para mantenerse durante los combates. Otro punto es soportar dolor pues la pelea la gana quien no se rinde frente al dolor. Por otro lado, tenemos el entrenamiento y la disciplina que requiere un esfuerzo para llegar al logro de los objetivos.

La preparación de la mente es una de las acciones que exhibe un buen luchador.  Estar mentalmente preparado te ayuda a recibir dolor sin rendirte con facilidad. Además, debe conocer cómo protegerse porque la defensa es un punto vital en los que practican la lucha. El bloqueo y el contraataque evita los daños de los rivales.

El penúltimo aspecto te muestra que no se necesita ser solo músculos. De nada sirve tener una montaña de bíceps y tríceps y que no te puedas ni mover. También debes ser un luchador rápido. Finalmente, exhibir los músculos de un luchador requiere sacrificios porque uno bueno renuncia a todo lo que le limite llegar a ser el mejor. 

Los años pasan y cuestan. La acumulación constante por el desgaste físico, el estrés y el cansancio siempre suele afectar a los luchadores. Es normal que su estado de ánimo le afecte por la carga que lleva. En ocasiones puedes pensar ¿merece la pena la dedicación y esfuerzo? 

A veces reciben buenos sueldos, pero no se ven recompensados. Sin contar que hasta los propios directivos están siempre enfocados en las rivalidades con los contrincantes. Sin embargo, detrás de todo ello hay dieta, alimentación, entrenamiento, imagen, etc. que deben cuidar. Estas estrellas de la lucha se esfuerzan para brindar un buen espectáculo.

Para alcanzar el éxito este deporte demanda niveles altos de fuerza y potencia. Investigaciones recientes han demostrado que se puede elegir entre un entrenamiento de potencia con calidad o enfocado en resistencia. Si bien es cierto que cada uno posee estilos distintivos es muy importante el entrenamiento constante. No obstante, el entrenador debe constatar que el luchador esté descansado para que entrene de forma efectiva. Por eso es necesario un gran programa de rutinas para fortalecer el cuerpo. 

A continuación, te presento varios ejemplos de ejercicios que se incluyen en los protocolos de los luchadores. Sentadillas con saltos, estocadas, cargadas de potencia a una mano con mancuernas y envión colgante desde la cadera y desde la rodilla. Otra variante de entrenamiento en circuito que se aplica es: prensa de piernas, press de banca y de hombros con mancuernas. También peso muerto con las rodillas extendidas, estocadas en diversos ángulos, elevaciones de talones y remo sentado. Además de curl de bíceps, tirones de polea, desarrollo del núcleo y envión y tirón colgante.